lunes, 12 de octubre de 2009

APTITUD FISICA PARA EL TRABAJO


El mundo laboral y la constante preocupación por la calidad de vida del trabajador en el ámbito de la empresa queda reflejado con la regulación de las diversas leyes de Prevención de Riesgos Laborales.


Actualmente las primeras causas de absentismo laboral se relacionan con aspectos físicos y psíquicos en los que la actividad física se muestra como una posible herramienta de trabajo para ayudar a prevenir dichas patologías y en cualquier caso, limitar el período de baja laboral de un trabajador.


Existen numerosos estudios que demuestran los beneficios de la actividad física. Además esto coincide con una clara conciencia social acerca de la actividad física ligada con la salud. Sin embargo, no existe una política empresarial en la que la actividad física figure como un elemento más de la vida e interacción de la empresa

Diferentes investigaciones reflejan el aumento en la frecuencia de las siguientes alteraciones físicas:

*Dolores de espalda


Cerca de un 80% de la población en edad productiva padece a lo largo de su vida laboral dolores de espalda, que llegan a generar unos costes totales en sanidad, equivalentes al 2% de PIB y se ha convertido en la segunda causa de absentismo laboral.


*La lumbalgia, provoca un 11,4 % de las bajas laborales. Lo que supone costos para la Seguridad Social.

*Trastornos músculo-esqueléticos


El 26 % de los accidentes de trabajo y el 93 % de las enfermedades profesionales tienen su origen en este problema.

Las causas más habituales de los anteriores son las posturas inadecuadas, las manipulaciones de cargas y la realización de movimientos repetitivos. Está demostrado que la actividad física evita una serie de patologías y favorece las relaciones interpersonales.


Un empleado con ciertos estándares físicos laborales, resulta en un trabajador con mayor productividad. Empleados “en forma” provocan una reducción del absentismo laboral.
El ejercicio físico y la actividad laboral, se pueden encontrar unidas por la Gimnasia Laboral. Actualmente algunas empresas estimulan a sus empleados para realizar actividades físicas dentro o fuera del área laboral, pero es importante continuar gestionando la regulación en la normatividad, en materia de salud laboral.

Indudablemente todo trabajo que no es de carácter estrictamente intelectual se realiza por medio de la acción muscular; un individuo con buena condición física tiene la capacidad de cubrir las demandas de su trabajo con las reservas suficientes, de la misma forma puede vivir de forma activa con el minimo de riesgo de lesión o incapacidad

Cuanto mayor actividad física requiera el trabajo que se desempeña, mayor intervención de la fisiología muscular, incluida la actividad cardiovascular. De ahí la importancia de estimar los siguientes valores:

· Frecuencia Cardiaca: Parametro que determina la intensidad del trabajo (parametro normal 60 – 100 lat. por minuto)

· Frecuencia Cardiaca de reposo: Se debe obtener sin realizar ningun tipo de actividad, inmediatamente al despertarse (lo ideal es 70 lat. por minuto o menos)

· Frecuencia Cardiaca de Esfuerzo: Para obtener la cifra se realizan 10 minutos de actividad fisica moderadamente intensa, pasado ese tiempo se toma el pulso y se registra (esta primer cifra es la F.C.E.); dejar pasar un minuto y tomar nuevamente el pulso esta segunda cifra se denomina Frecuencia Cardiaca en Recuperación.

· Frecuencia Cardiaca Máxima: Se refiere al nivel máximo que todo individuo debe alcanzar sin arriesgar su salud; la formula para calcularla es: 220 – edad= FCM; y calculando el 70% del resultado se obtiene la zona ideal en la que debe trabajar el individuo.

Un concepto más necesario para valorar la aptitud física es el cálculo del Consumo Máximo de Oxigeno (VO2), la cual mide la capacidad del cuerpo para transportar oxígeno desde el aire ambiental hasta los músculos que estan trabajando, dicho en otras palabras es la cantidad máxima de oxígeno que un individuo puede tomar de la sangre, para llevarlo a los tejidos, generar energía y así poder desempeñar sus actividades; se espresa en mlO2/kg/min; los valores normales son:

ü Mujeres : 35 – 40 mlO2/kg/min

ü Hombres : 40 – 45 mlO2/kg/min

ü Individuos con buena condición: 50 – 65 mlO2/kg/min

ü Deportistas de alto rendimiento: Más de 65 mlO2/kg/min

Hay 2 pruebas físicas por medio de las cuales se puede calcular la VO2:

1. Astrand: Consiste en subir y bajar de un banco de 41 cm de alto durante 3 minutos, posterior a este tiempo se toma la frecuencia cardiaca y se emplean las siguientes formulas:

· Hombres: 111.33- (0.42 x ritmo cardiaco)

· Mujeres: 65.81 – (0-1847 x ritmo cardiaco)

2. Cooper:Consiste en cubrir la mayor distanciaposible en 12 minutos, posterior a esto se emplea la siguiente formula:

· (distancia en metros – 504.9)

44.73

Las condiciones para realizar las pruebas aerobicas son:

*Ausencia de procesos infecciosos
*No haber ingerido alimentos de 2 a 3 horas antes
*No haber realizado esfuerzos importantes un día anterior a la prueba.
*No haber tomado estimulantes (cafe, té o refresco de cola)
*No modificar de forma significativa la alimentación los días precedentes

Criterios para la interrupción de las pruebas:

*Dolor precordial agudo
*Disnea severa
*Vértigo o desmayo
*Ataxia, temblores, sincope
*Signos de mala perfusión (detección súbita de la sudoración o cianosis)


ASPECTOS LEGALES DE LA SALUD LABORAL

Como ya se describió en el artículo de antecedentes de salud en el trabajo a lo largo de los años se ha trabajado por el respeto a los derechos de los trabajadores en cada uno de sus oficios, ocupaciones y/o profesiones. En nuestro país se encuentran vigentes diferentes organismos nacionales e internacionales, que vigilan el cumplimiento de la salud en el trabajo, los cuales se describen a continuación:

LEY GENERAL DE SALUD

El titulo séptimo PROMOCIÓN DE LA SALUD, en su capitulo V de Salud Ocupacional y en sus artículos del 128 al 132 establece lo siguiente:

· Criterios para el uso y manejo de sustancias, maquinaria, equipos y aparatos, con el objeto de reducir riesgos a la salud del personal ocupacionalmente expuesto, principalmente elementos radioactivos.

· Determinar límites máximos de exposición, realizando estudios toxicológicos.

· Secretaria de salud, Instituciones públicas de seguridad social y gobierno promoverán, desarrollaran y difundirán investigación multidisciplinaria para prevenir y controlar enfermedades y accidentes de trabajo.

· Programas tendientes a la prevención en materia de riesgos de trabajo.

LEY FEDERAL DEL TRABAJO

Durante el periodo presidencial de Gustavo Díaz Ordaz, se decreta la Ley Federal de Trabajo, la cual rige las relaciones de trabajo comprendidas en el artículo 123 de la Constitución. Las normas de trabajo tienden a conseguir el equilibrio y la justicia social en las relaciones entre trabajadores y empleadores. Entre los puntos importantes que destaca esta ley se resaltan:

Los artículos 174 al 180, que especifican las situaciones del trabajo en menores de edad, especificando:

o Individuos mayores de 14 años y menores de 16 que quieran laborar deberán realizarse un certificado médico que valore su aptitud física para el trabajo.

o Prohibido que menores de 16 años desempeñen actividades en: expendio de bebidas embriagantes, que afecten su moralidad y buenas costumbres; trabajos subterráneos o submarinos; trabajos superiores a sus fuerzas y que impidan su desarrollo físico normal, labores peligrosas o insalubres.

o La jornada no deberá exceder las 6 hrs. Diarias

o Prohibidas las horas extras y el trabajo en días festivos y de descanso obligatorio, en todo caso deberá pagarse al 200%

o Disfrutarán de un periodo anual de vacaciones pagadas de 18 días laborales.

o Los patrones están obligados a proporcionar los certificados médicos, inspección especial y a distribuir el trabajo para que puedan cumplir con sus programas escolares.

ORGANIZACIÓN INTERNACIONAL DEL TRABAJO

La Organización Internacional del Trabajo (OIT) está consagrada a la promoción de oportunidades de trabajo decente y productivo para mujeres y hombres, en condiciones de libertad, igualdad, seguridad y dignidad humana. Sus objetivos principales son promover los derechos laborales, fomentar oportunidades de empleo dignas, mejorar la protección social y fortalecer el diálogo al abordar temas relacionados con el trabajo.

Al promover la justicia social y los derechos humanos y laborales reconocidos a nivel internacional, la Organización persiste en su misión fundadora: la paz laboral es esencial para la prosperidad. En la actualidad la OIT favorece la creación de trabajo decente y las condiciones laborales y económicas que permitan a trabajadores y a empleadores su participación en la paz duradera, la prosperidad y el progreso.

La OIT es la institución mundial responsable de la elaboración y supervisión de las Normas Internacionales del Trabajo. Al trabajar junto a los 178 paises miembros, la OIT busca garantizar que las normas del trabajo sean respetadas tanto en sus principios como en la práctica

Fue creada en 1919, como parte del Tratado de Versalles que terminó con la Primera Guerra Mundial, y reflejó la convicción de que la justicia social es esencial para alcanzar una paz universal y permanente.

Su Constitución fue elaborada entre enero y abril de 1919 por una Comisión del Trabajo establecida por la Conferencia de Paz, que se reunió por primera vez en París y luego en Versalles. La Comisión, presidida por Samuel Gompers, presidente de la Federación Estadounidense del Trabajo (AFL), estaba compuesta por representantes de nueve países: Bélgica, Cuba, Checoslovaquia, Francia, Italia, Japón, Polonia, Reino Unido y Estados Unidos. El resultado fue una organización tripartita, la única en su género con representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores en sus órganos ejecutivos.

La Constitución contenía ideas ya experimentadas en la Asociación Internacional para la Protección Internacional de los Trabajadores, fundada en Basilea en 1901. Las acciones en favor de una organización internacional que enfrentara temas laborales se iniciaron en el siglo XIX, y fueron lideradas por dos empresarios, Robert Owen (1771-1853) de Gales y Daniel Legrand (1783-1859) de Francia.

La fuerza que impulsó la creación de la OIT fue provocada por consideraciones sobre seguridad, humanitarias, políticas y económicas. Al sintetizarlas, el Preámbulo de la Constitución de la OIT dice que las Altas Partes Contratantes estaban “movidas por sentimientos de justicia y humanidad así como por el deseo de asegurar la paz permanente en el mundo...”

Había un verdadero reconocimiento a la importancia de la justicia social para el logro de la paz, en contraste con un pasado de explotación de los trabajadores en los países industrializados de ese momento. Había también una comprensión cada vez mayor de la interdependencia económica del mundo y de la necesidad de cooperación para obtener igualdad en las condiciones de trabajo en los países que competían por mercados. El Preámbulo, al refejar estas ideas establecía:

  • Considerando que la paz universal y permanente sólo puede basarse en la justicia social;
  • Considerando que existen condiciones de trabajo que entrañan tal grado de injusticia, miseria y privaciones para gran número de seres humanos, que el descontento causado constituye una amenaza para la paz y armonía universales; y considerando que es urgente mejorar dichas condiciones;
  • Considerando que si cualquier nación no adoptare un régimen de trabajo realmente humano, esta omisión constituiría un obstáculo a los esfuerzos de otras naciones que deseen mejorar la suerte de los trabajadores en sus propios países;

Las áreas que podrían ser mejoradas enumeradas en el Preámbulo continúan vigentes, por ejemplo:

  • Reglamentación de las horas de trabajo, incluyendo la duración máxima de la jornada de trabajo y la semana;
  • Reglamentación de la contratación de mano de obra, la prevención del desempleo y el suministro de un salario digno;
  • Protección del trabajador contra enfermedades o accidentes como consecuencia de su trabajo;
  • Protección de niños, jóvenes y mujeres.
  • Pensión de vejez e invalidez, protección de los intereses de los trabajadores ocupados en el extranjero;
  • Reconocimiento del principio de igualdad de retribución en igualdad de condiciones;
  • Reconocimiento del principio de libertad sindical;
  • Organización de la enseñanza profesional y técnica, y otras medidas similares.

La OIT realiza su trabajo a través de tres órganos fundamentales, los cuales cuentan con representantes de gobiernos, empleadores y trabajadores.

Los Estados miembros de la OIT se reúnen en junio de cada año en Ginebra para participar en la Conferencia Internacional del Trabajo. Cada Estado está representado por dos delegados gubernamentales, uno de los empleadores y otro de los trabajadores. Las delegaciones, frecuentemente encabezadas por ministros que hacen uso de la palabra en nombre de sus gobiernos, cuentan con el apoyo de asesores técnicos.

Los delegados de empleadores y trabajadores pueden expresarse libremente y votar de acuerdo con las instrucciones recibidas de sus propias organizaciones. En algunas oportunidades votan en forma opuesta, o en contra de las posiciones de los representantes de sus gobiernos.

La Conferencia establece y adopta normas internacionales del trabajo, y es un foro en el cual se debaten temas sociales y laborales de gran relevancia. Este organismo ha establecido difentes convenios que protegen los derechos del trabajador. Para mayor información navega por la página Web: www.ilo.org/global/lang-es/index.htm



ANTECEDENTES DE SALUD EN EL TRABAJO

Las distintas formas de actividad humana, a la vez que ayudan a transformar al hombre de las cavernas en el científico y el técnico del siglo XX, representan a menudo un factor importante en la producción de accidentes y enfermedades, ocasionados por los materiales, herramientas y equipos empleados en el trabajo, o bien por los productos y subproductos que se elaboran. El hombre primitivo aprendió esto en la práctica: al principio, vio disminuida su capacidad productiva por los accidentes propios de la caza y la pesca; después al hacerse minero, metalúrgico y artesano padeció las primeras enfermedades producidas por su trabajo.

En algunas obras que de Hipócrates (siglo V a.C.) se conservan, se atribuyen referencias que podrían señalar los primeros tratamientos para enfermedades y accidentes relacionados con el trabajo, sobre todo en mineros y metalúrgicos expuestos al plomo.

Posteriormente Galeno, tres siglos después (Siglo II a. C.) hizo observaciones interesantes acerca de las enfermedades de los mineros, curtidores, bataneros, químicos y otros.

Plinio en los principios de nuestra era (Siglo I d. C.) describe algunos elementos de protección personal, como máscaras hechas con vejigas de animales, para evitar la inhalación de polvos de minium (plomo rojo), siendo este el primer esbozo de una medida de prevención de riesgos de trabajo que registra la historia de la salud en el trabajo.

En el siglo XIV Georgius Agrícola (1556) y Paracelso (1567) idean maquinas ventiladoras, velos para la cara, botas y guantes, estas acciones coadyuvan a la prevención de accidentes de trabajo y enfermedades de trabajo.

Más adelante el italiano Bernardino Ramazzini (1633-1714) es considerado el fundador de la medicina del trabajo, quien realizó estudios bastante precisos sobre epidemiología. Publicando en 1700 el primer libro sobre salud ocupacional, estudiando y describiendo las enfermedades que afectaban a los trabajadores de los numerosos oficios conocidos hasta ese entonces. Este médico, consciente de que su ciencia era eminentemente social señalo que “la medicina del trabajo no se estudia en los consultorios, sino en los lugares de trabajo” y con esta se debe contribuir al bienestar de los trabajadores y vigilar en la medida de lo posible, que estos cumplan sus obligaciones sin sufrir daño.

El aspecto preventivo de las enfermedades de trabajo fue abordado por Lehmann en 1884, al dar las bases para el control actual del ambiente industrial.

Fue una nueva estructura económico-social, el capitalismo industrial, la que crea nuevas formas de organización del trabajo. El siglo XVIII constituye una época de profundos e importantes cambios tecnológicos, que dieron nacimiento a la revolución industrial; la patente otorgada a james Watt en 1781, para una maquina de vapor de movimiento relatorio, y la invención en 1785 de un regulador automático de velocidad, usado aun en la actualidad permitieron al hombre, por primera vez, disponer de una fuente de energía controlable, barata y abundante, independizándolo de las que podríamos llamar naturales, como la energía cinética de las corrientes de agua y viento (difíciles de controlar), y de la energía del hombre y animales (de escaso rendimiento) . El éxito de la invención quedo demostrado al instalarse sólo en Inglaterra entre los años 1783 y 1800, unas 500 máquinas de vapor.

La organización de las primeras industrias determino nuevas condiciones de trabajo; en talleres oscuros y contaminados por el polvo, el homo, los gases y vapores producidos por los procesos de elaboración, se amontonaban hombres, mujeres y niños, en jornadas de 12 y más horas diarias. Los salarios alcanzaban apenas para adquirir los alimentos y ropa indispensables. Los accidentes y enfermedades de trabajo diezmaban a los grupos laborales, cuya posibilidad de vida apenas sobrepasa los 30 años; pero el incipiente desarrollo económico y la falta de especialización los hacia fácil de reemplazar. Como consecuencia de ello la medicina reconoció la aparición de enfermedades de antaño desconocidas y de una mayor frecuencia de padecimientos hasta entonces raros

La primera guerra mundial (1914-1918), con la introducción de numerosas sustancias químicas peligrosas y la necesidad de construir y reparar los armamentos, el vestuario y los alimentos que precisaban un ejército que se comenzaban a mecanizar, trajo como consecuencia que se le diera importancia especial a las fuerzas laborales que, aunque alejadas de los frentes de batalla, podrían significar un aporte decisivo a la victoria o la derrota. Se comenzaron a desarrollar los primeros intentos científicos de proteger a los trabajadores, se analizaron las enfermedades que aquejaban, se estudiaron las condiciones ambientales y se reviso la distribución y diseño de la maquinaria y del equipo, con el objeto de prevenir y evitar los accidentes y enfermedades de trabajo y las incapacidades consecuentes.

Este movimiento continuó en la época comprendida entre las dos guerras mundiales, obteniendo su mayor auge en el transcurso de la segunda. Los conflictos causadas por las anteriores dio como resultado el origen del sindicalismo, que velaba por el respeto a los derechos de salud del trabajador.

Es en el siglo XIX que se ven reflejados los avances en materia de salud laboral con la regulación en la normatividad en salud laboral. Y en el siglo XX con la introducción de programas de prevención de riesgos laborales y de promoción a la salud de los trabajadores.

En Latinoamérica, los movimientos sociales iniciados alrededor de los años 20 hicieron surgir los primero intentos de protección a los trabajadores, aunque con anterioridad ya existían en diversos países algunas disposiciones al respecto, generalmente con pocas bases técnicas. A partir de 1947, los programas de apoyo norteamericano impulsan en la creación de servicios de salud ocupacional en: Perú, Chile, Bolivia, Colombia y Venezuela. Entre los acontecimientos que destacan se funda el Instituto de salud Ocupacional en Perú y en junio de 1963 la organización del Instituto de Higiene del trabajo y contaminación atmosférica de Chile.

Respecto a los antecedentes conocidos en México, en la época de la colonia durante el reinado de Carlos II se crea una legislación de previsión social en la que se contempla:

· Pago de un salario mínimo ( en dinero o en especie)

· No se permitiría llevar a trabajar a hombres de tierra caliente a fría y viceversa

· En caso de enfermar tenían derecho a recibir atención y medicamentos

· Por accidentes de trabajo deberían seguir percibiendo la mitad de su salario hasta su recuperación

· Para los mineros en caso de fallecer por accidente de trabajo, se daba dinero a los familiares

Las medidas descritas se pierden durante la época de la independencia, sin embargo a principios del siglo XX surge nuevamente el interés por legislar accidentes de trabajo.

En 1917 la constitución política de los Estados Unidos Mexicanos establece en su articulo 123 las responsabilidades de la empresa con el trabajador. En 1930 en el periodo presidencial de Emilio Portes Gil se crea y federaliza la Ley Federal de Trabajo.

El Dr. Jorge Fernández Osorio es considerado el pionero de la medicina del trabajo y de la salud en el trabajo en México. Por su maestría en medicina industrial realizada en Estados Unidos; en 1968 crea la especialidad de Medicina del Trabajo, en el IMSS, que hasta la fecha sigue vigente.

Actualmente esta ciencia ha evolucionado y hoy se conoce como salud en el trabajo, la cual requiere de interdisciplinariedad para diagnosticar, prevenir y controlar factores de riesgo y la repercusión en la salud del trabajador.